Ir al contenido principal

La Última Vuelta: La tragedia del Guaire

Por supuesto que no había nada nuevo en este armazón,
una que otra vista que había pasado de ser percibida, pero cada momento de altura viene con una ligera recaída.
Difícil resulta comprender toda la maldad que entre estas calles se habita,
Los niños correteando entre las carrozas de los enchufados,
El silencio atemorizante mientras evitas hacer contacto con los malandros
y la increíble sorpresa de los clase alta demostrando los pocos valores que sus cabezas integran.

No debería sorprenderme pero en realidad, después de tanto caminar, viajar y batallar, es deprimente notas que acá muy poquito importa la bondad.

Afortunadamente a mi gente nada de eso le interesa y hago amigos en cada esquina y cada domingo es una fiesta.
Tengo la dicha de quien sencillamente se siente dichoso y las recompensas que a lo largo me brindan llena esta alma de gozo.

Se trata de construirnos en versos,
encontrarnos en errores
Fantasear con nuestros sueños
y como siempre, darlo todo por ellos.

Como diría mi mentora desde el fondo de Gato Negro
"Al inocente, Dios lo protege" y bajo los consejos y mi pésimo sentido de orientación, sigo despertando las almas de los corazones que conmigo, siempre han esperado por más que un simple atajo.


Comentarios

Entradas populares de este blog

El silencio de los inocentes

Hoy los vi pasarse de nuevo como viejos en sus bufetes Bien vestidos, perfumados, elegantes... Hasta con copete. Me intrigó mucho sus dudas Se quejaban de lo injusta de la muerte Yo que pensaba la vida era condena dura Fíjese que algunos de verdad no tienen deberes. Sé que me reconoció Sé que yo también lo conozco Sé que nuestras manos en algún momento estrechó Sé que nunca lo llamaré un hermano. A ti te dedico mi canto Mi poesía y mi locura A ti, completo y absoluto extraño Lleno de ira y ahogado en dudas Perdedor de quinelas Jaque-mate a tu reina Celebro tu condena Mientras, me visto de princesa.

Encarando a la muerte

La parca a decidido que es momento de revelar amoríos Salieron todos como locos buscando trozos de mis despojos Estaban sedientos y yo aterrada Ausentes de todo credo me veían pasar como su reflejo El ángel loco, caído del cielo. Mírala hablar con cualquiera Cruzar las piernas Profesar condenas Mírala existir en nuestra existencia, completamente ajena. Una nena se me acercó y me preguntó con voz quebrantada "Niña, ¿usted tiene casa?" Nunca he pertenecido Perderme, Volver, Hoy da lo mismo.

Big hard sun

Todos somos panas, pero nadie es pana de nadie hasta que se demuestre lo contrario ¿Cómo uno puede comer sabiendo que hay quienes no comen?, O amar sabiendo que hay locos de atar en las calles, sin medida ni distinción Orgullo y prejuicio nunca fue juego Pero cuando inventas un poco Cuando vas más allá del fuego Todo se torna adictivo e incluso convulsionante Y si se trata de vicios, hacerme estandarte.